El tratamiento farmacológico de la osteoporosis presenta limitaciones y no está exento de efectos adversos, por lo que la prevención de fracturas mediada por la actividad física puede representar una alternativa a considerar. El Lancet Diabetes Endocrinology ha publicado un artículo sobre la relación entre la actividad física y la salud esquelética que ha revisado estudios observacionales sobre fracturas óseas y ensayos clínicos controlados de intervenciones de actividad física en adultos >40 años. Los resultados muestran que, en general, un aumento de la actividad física -principalmente durante el tiempo de ocio o actividad física de moderada a intensa- se asocia a una disminución de riesgo de 1-40% de fractura de cadera y de todas las fracturas. Hay que considerar como limitación primaria de estos estudios que el ejercicio es más probable que lo practiquen las personas sanas y que en éstas la probabilidad de fractura es menor. Aunque la evidencia procedente de ensayos clínicos es insuficiente, parece que algunos tipos de ejercicio previenen las caídas y la pérdida de masa ósea, existiendo metanálisis que apoyan la efectividad del ejercicio físico contra las fracturas. Se sugiere que los programas que combinan ejercicio físico de impacto con ejercicio de resistencia progresiva de alta intensidad, podrían mantener o mejorar la masa ósea y prevenir fracturas, y que la fortaleza funcional y el entrenamiento del equilibrio previene fracturas. Debajo se reproduce un cuadro del artículo que recoge los ejercicios recomendados para mantener la salud ósea.
Huesos sanos: Actividad física
Recomendaciones de actividad física para prevenir fracturas.
Última modificación:28-11-2019